Betula Pendula Roth
Estados en los que se requiera un aumento de la diuresis: afecciones genitourinarias (cistitis, ureteritis, uretritis, pielonefritis, oliguria, urolitiasis), hiperazotemia, hiperuricemia, gota, hipertensión arterial, edemas, sobrepeso acompañado de r
PARTES UTILIZADAS DEL ABEDUL:
Las hojas, eventualmente la corteza, yemas y savia de Betula pendula Roth. ( sin.: B. verrucosa Ehr., B. alba L.), B. pubescens Ehrh. o especies híbridas de ambas.
PRINCIPIOS ACTIVOS DEL ABEDUL:
Flavonoides (3%): hiperósido (0,8%), avicularina (0,5%), galactosil-3-miricetol, glucoronil-3-quercetol, quercitrósido. Aceite esencial (1%): monotropitósido (90%) que se hidroliza en salicilato de metilo; triterpenos: ácido betulínico, betulinol. Sales potásicas (4%). Taninos, especialmente en la corteza (10%). Acido ascórbico (5%).
EFECTOS DEL ABEDUL:
Los flavonoides y las sales potásicas le confieren una acción diurética, favoreciendo la eliminación de agua, cloruros, urea y ácido úrico. El aceite esencial es analgésico, antiinflamatorio, antiséptico, antipirético y cicatrizante. Los taninos contenidos en la corteza son responsables de la acción astringente (antidiarreico, hemostático local); la savia tiene un efecto diurético y analgésico.
INDICACIONES DEL ABEDUL:
Estados en los que se requiera un aumento de la diuresis: afecciones genitourinarias (cistitis, ureteritis, uretritis, pielonefritis, oliguria, urolitiasis), hiperazotemia, hiperuricemia, gota, hipertensión arterial, edemas, sobrepeso acompañado de retención de líquidos.
Gripe, resfriados, síndrome febril, cefaleas.
Inflamaciones osteoarticulares: artritis, artrosis, bursitis, tendinitis, fibrositis, fibromialgias.
En uso tópico: cicatrización de heridas, celulitis, eczemas, psoriasis, alopecia, vulvovaginitis, cervicitis.
CONTRAINDICACIONES DEL ABEDUL:
Hipersensibilidad a los salicilatos.
No prescribir extractos alhohólicos a niños menores de dos años ni a consultantes en proceso de deshabituación etílica.
PRECAUCIÓN EFECTO TÓXICO DEL ABEDUL:
El uso de diuréticos en presencia de hipertensión o de cardiopatías, sólo debe hacerse por prescripción y bajo control médico, dada la posibilidad de descompensación tensional o la potenciación del efecto de los cardiotónicos, por la posible eliminación urinaria de potasio.
Por su contenido en salicilatos, aunque están presentes en escasa proporción en la planta, aconsejamos que se tenga una especial precaución a la hora de prescribir extractos concentrados de abedul a pacientes con trombocitopenia, hemorragias activas o que estén siguiendo tratamientos con hemostáticos o anticoagulantes.
Tener en cuenta el contenido alcohólico del extracto fluido, tintura y jarabe durante el embarazo, la lactancia, en pacientes con gastritis, úlceras gastroduodenales, síndrome del intestino irritable, colitis ulcerosa, hepatopatías, epilepsia, Parkinson u otras enfermedades neurológicas.
USO TERAPEÚTICO Y DOSIS DEL ABEDUL:
* Infusión de hojas: 40 g/l, infundir 10 minutos. Tres tazas al día. Cuando convenga alcalinizar la orina, se puede añadir 1 g de bicarbonato sódico, cuando la infusión esté a 40º C.
* Decocción de corteza o yemas (febrífugo): 5 g/taza, hervir 5 minutos, tres tazas al día, entre comidas.
* Extracto fluido (1:1): 30 a 60 gotas, tres veces al día.
* JARAbe (30% de extracto fluido): una a tres cucharadas soperas al día.
* Tintura (1:10): 50-100 gotas (1-2 ml), una a tres veces al día.
* Extracto seco (5:1): 300-600 mg/dosis, 2-3 tomas al día.
* Jugo fresco (savia): 1 a 3 cucharadas soperas (15 ml) al día, diluido en infusión, agua o zumo.